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Cambiando el faro por molinos: Destino Albacete

Semana Santa es prácticamente sinónimo de vacaciones, de pasar tiempo al aire libre disfrutando de las procesiones, de los pasos, de la comida y de compartir tiempo con los tuyos, pero ¿Por qué no hacer todo esto en un lugar diferente al de todos los días? ¿Por qué no viajar?  Y concretando más aún ¿Por qué no pasar la Semana Santa en Albacete? Tú haz la maleta que nosotros te llevamos.

Albacete, destino regio

Ya sabemos que en Santa Pola tenemos prácticamente de todo. Sin embargo, nunca está de más conocer nuevos lugares. Ya lo estarás imaginando, ¡queremos hacerte una propuesta! Nos gusta ponértelo fácil.

En esta ocasión, nuestra propuesta te llevará hasta el regio territorio de Castilla La Mancha, lugar internacionalmente conocido gracias a Dulcinea del Toboso, al loco hidalgo de Don Quijote y a su inseparable compañero Sancho Panza. Posiblemente, “El Quijote” de Miguel de Cervantes sea el libro que a más idiomas se ha traducido y por ello ha expandido la postal de los molinos y la variada gastronomía manchega alrededor del mundo ¡Y no es para menos!

Molinos de viento

Molinos de viento

Gastronomía manchega: alimentando personajes ilustres desde siempre

Esas recetas fueron las que alimentaron a ilustres manchegos como lo fueron el rey Alfonso X, conocido por su sabiduría, la reina Juana I conocida por su… ¿espontaneidad para expresar sus sentimientos? Sí, vale, más bien por sus celos… Estos le llevaron a ganarse la fama de Juana la Loca. ¿Pero qué sería de la vida sin un poco de locura?

En contrapunto a esa excentricidad, La Mancha también vio evolucionar el arte religioso del Greco, la escritura de Garcilaso de la Vega, el estilo de Antonio Gala, el talento de la seductora Sara Montiel o la fama del cineasta Pedro Almodóvar. No íbamos a proponerte viajar a un sitio que no mereciera la pena. De hecho, vamos a hilar todavía más fino. Te proponemos que te acerques a nuestra estación y cojas un autobús con destino a Albacete. Esta Semana Santa cambiaremos el faro por los molinos de viento.

Albacete, ciudad internacional

Viajar a Albacete supone alejarnos del mar y trasladarnos casi al centro de España.  En nuestro camino no veremos faros que lo alumbren, pero si “torres” tan altas como estos: los molinos eólicos. Sin duda, la postal de Albacete ha cambiado en las últimas décadas, se ha modernizado. No os preocupéis, los molinos contra los que luchaba Alonso Quijano también siguen en pie (bueno, muchos de ellos).

Albacete es una de las ciudades más importantes de Castilla-La Mancha. Además, su situación llana y la eliminación de barreras arquitectónicas han propiciado que sea una de las urbes con mayor accesibilidad y la séptima ciudad española con mejor valoración en calidad de vida.  Si ese es el resultado de una encuesta a personas que viven cada día allí, imagina cómo puede ser tu experiencia estando de vacaciones…O mejor no imagines, ¡vívelo!

Su feria está considerada como una de las más importantes de España y es también conocida internacionalmente.  Ocio, gastronomía de raíces y sabor, ciudad de carácter abierto y moderno…y a menos de dos horas de Santa Pola ¿Qué más podemos pedir?  El escritor Azorín ya debió de darse cuenta de sus virtudes cuando describió la ciudad como “El Nueva York de la Mancha” en uno de sus poemas.

Semana Santa en Albacete: hora de comer

Una vez llegues a Albacete hay otra ruta que debes seguir, la que marque tu olfato. La gastronomía manchega es muy rica durante todo el año, pero en fechas como Semana Santa se vuelve todavía más especial. Estás de vacaciones, no te preocupes de las calorías. Tú, que como santapolero disfrutas de un buen caldero, sabrás valorar lo que las cocinas de Albacete te ofrecerán. Déjate seducir por su comida.

En épocas de cuaresma la gastronomía nacional apuesta más por platos fundamentados en pescados. En esta ocasión el pescado elegido es el bacalao. Con él se componen dos de los platos principales de estas fechas:  El potaje de Semana Santa, también conocido como potaje de vigilia,  y el Atascaburras

Potaje de vigilia

Potaje de vigilia

Atascaburras

Atascaburras

Los dulces no quedan en el olvido en estas fechas. De hecho, en muchas casas manchegas no se ha abandonado la tradición de amasar los dulces propios de Semana Santa

Francia tendrá sus profiteroles, pero en Albacete no se quedan atrás con los buñuelos. Atrévete a probarlos de un solo bocado, deja que el sabor de la crema y la masa frita se mezclen en tu boca

Buñuelos

Buñuelos

A la sartén, mojadas en leche, espolvoreadas con canela y bien frías. Ese es el punto perfecto para comerte una torrija.

Torrijas

Torrijas

También con leche y con toques cítricos se elabora la leche frita, otro manjar típico de estas fechas en territorios manchegos.

Leche frita

Leche frita

Muy similar en forma a los comerciales, pero nada parecidos en sabor, los rolletes fritos. Una de las recetas que pasan de generación en generación dentro de las familias. Cada uno tiene su medida y su toque, aunque todos tienen algo en común: ¡Están buenísimos!

Rollos fritos

Rollos fritos

¿Todavía te queda alguna duda de qué hacer en Semana Santa?

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